jueves, 3 de abril de 2014

¿Por qué elegir una crianza con apego?

Hoy en día, no es nada raro escuchar a madres que desean seguir su instinto a la hora de la crianza de sus hijos. La crianza con apego, no sólo se basa en el instinto, sino que también tiene una fuerte base científica, hoy te contamos un poquito sobre ésto..




 La crianza con apego (attachment parenting) término acuñado por el pediatra William Sears, es una filosofía basada en los principios de la teoría del apego, término acuñado por el psiquiatra y psicoanalista John Bowlby en la psicología del desarrollo, según  ésta teoría, un fuerte enlace emocional con los padres durante la infancia, también conocido como apego seguro, es precursor del desarrollo de una personalidad segura e independiente, un buen comportamiente, independencia,y relaciones buenas y sanas. Este tipo de crianza tendrá efectos positivos durante toda la niñez, adolescencia y adultez.

Un bebé nace con lo que se llama, cerebro primitivo, (el cerebro del bebé está completamente formado recién alrededor de los 3 añitos) por lo cual se basa sólo en su instinto (como los mamíferos), el cerebro superior se adquiere a partir de los 3/4 años, por lo que no es posible en los casos que se dice que un bebé llora para engañarnos o por manipularnos, no es cierto, ya que físicamente es imposible.
Hay que destacar que cada uno puede tomar la decisión que desee, pero últimamante, también existe otro punto de vista de "la crianza por apego" algunas personas de nuestro entorno familiar o social la ven más como una moda, recriminando y queriendon hacernos entender de que así malcriearemos a nuestros hijos o seremos malos padres, por no dejarlos llorando un buen rato...

En mi opinión particular creo que la crianza tradicional, es completamente limitadora y se centra únicamente en el futuro, restando importancia al hoy, (al presente) y la crianza con apego, es lo que al menos yo tuve la suerte de disfrutar y vivir, y que han hecho muchas madres y abuelas durante toda la vida: amar, cuidar, abrazar, acunar, mimar... tareas excepcionales para una madre, y para mi (y en mi humilde opición) eso no tiene precio.

Imágenes:  alternet.org

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Las Penélopes